Leestock 2024

Leestock es un vibrante y popular festival de música que se celebra anualmente en el pueblo de Long Melford, en el Reino Unido. Este animado evento presenta un cartel diverso de músicos de talento de varios géneros, creando una experiencia emocionante e inolvidable para los asistentes. El festival, que comenzó como una pequeña reunión local, se ha convertido en un renombrado acontecimiento musical que atrae tanto a artistas locales como a otros conocidos de todo el país, como Dodgy y el ex vocalista de TheBluetones Mark Morriss. Desde el rock al indie, pasando por el pop o el folk, Leestock ofrece una dinámica mezcla de estilos musicales para satisfacer a una amplia gama de gustos.

Lo que hace verdaderamente especial a Leestock es su compromiso de apoyar causas benéficas. El festival se fundó inicialmente en memoria de Lee Dunford, un músico local que falleció trágicamente muy joven. En su honor, Leestock dona todos los ingresos a diversas organizaciones benéficas, lo que lo convierte no sólo en una celebración de la música, sino también en una plataforma para devolver algo a la comunidad. En 2013, el festival se trasladó de nuevo a la grandiosidad de Melford Hall, una propiedad del National Trust situada en Long Melford. Los cabezas de cartel de la edición de este año fueron, entre otros, Toploader. A principios de 2014, el festival había conseguido reunir casi 50.000 libras en donaciones para la Fundación Willow. La edición del año siguiente, celebrada una vez más en el espléndido Melford Hall, contó con cabezas de cartel como The Lightning Seeds y una encantadora actuación acústica de Terrorvision.

En 2016, The Feeling ocupó el centro del escenario como cabeza de cartel, al que se unió un impresionante cartel con The Hoosiers, Lucy Spraggan y los New Town Kings. Tal fue la popularidad del festival que las entradas para el sábado se agotaron por completo con antelación, y el domingo siguiente se congregaron multitudes que batieron récords. En la semana siguiente al evento, los organizadores revelaron con alegría que sus contribuciones a la Fundación Willow habían superado un hito increíble, sobrepasando una generosa donación de 100.000 libras esterlinas.