Wellington es la capital de Nueva Zelanda y cuenta con una escena musical emergente de la que han salido músicos y grupos de gran talento. Brooke Fraser, oriunda de Wellington, ha dejado huella con su voz conmovedora y sus letras, alcanzando el éxito internacional con álbumes como "What to Do with Daylight" y "Flags". The Phoenix Foundation, banda de rock indie también de Wellington, destaca por su música experimental, que fusiona estilos rock, psicodélico y electrónico. Además, Thomas Oliver, multiinstrumentista de la ciudad, exhibe su excepcional talento con la guitarra slide y ofrece una conmovedora voz inspirada en el blues, cautivando al público con su mezcla única de blues, folk y música de raíces. Trinity Roots es un grupo de reggae que ha contribuido significativamente a la comunidad reggae de la ciudad, creando potentes composiciones que mezclan influencias del reggae, el soul y el dub, resonando entre los oyentes tanto locales como internacionales.
ElMuseo de Nueva Zelanda Te Papa Tongarewa ofrece una completa exploración de la historia, el arte y la cultura del país, proporcionando a los visitantes una comprensión más profunda del lugar que ocupa Wellington en el contexto nacional más amplio. El Festival de Wellington, que se celebra anualmente, exhibe un abanico de disciplinas artísticas que incluye artes visuales, danza, teatro y música. Este festival reúne a artistas locales e internacionales, creando un ambiente vibrante que celebra la creatividad y el intercambio cultural. Wellington también acoge el World of WearableArt (WOW) Awards Show, un evento único que combina moda, arte y performance en una espectacular muestra de creatividad e innovación.
La historia de Wellington está profundamente entrelazada con la de Nueva Zelanda. La situación geográfica de la ciudad, enclavada entre un puerto natural y las colinas que la rodean, la convirtió en un importante asentamiento tanto para los colonos maoríes como para los europeos. La firma del Tratado de Waitangi, un momento significativo en la historia de Nueva Zelanda, tuvo lugar en Wellington en 1840.
A lo largo de los años, Wellington ha desempeñado un papel crucial en la gobernanza y el desarrollo del país. Se convirtió en la capital de Nueva Zelanda en 1865, sustituyendo a Auckland, y desde entonces ha sido el centro de las actividades políticas y administrativas. La arquitectura histórica de la ciudad, como los emblemáticos Edificios del Gobierno, refleja su condición de centro del poder político.